Paso a paso

Métodos de elaboración, técnicas, trucos y otras curiosidades explicadas paso a paso.

1. DECOUPAGE EN JABONES




  Es una técnica muy sencilla de decoración que también se puede aplicar a los jabones.
Necesitamos los siguientes materiales:
  • Tijeras
  • Papel de seda o servilletas con los motivos elegidos
  • Glicerina líquida
  • Pincel





 Recortamos el motivo con el que queremos decorar el jabón, si usamos una servilleta, tendremos que retirar las capas sobrantes y quedarnos sólo con la que lleva la estampación.







Con un pincel pintaremos la superficie del jabón con la glicerina líquida y pondremos encima el motivo, volveremos a pintar con glicerina el recorte.










 




Lo dejamos secar muy bien al menos 24 horas y ya estará listo.









2. MUCÍLAGO DE LINAZA


   El mucílago es una sustancia gomosa que se encuentra debajo de la cubierta de la semilla (cáscara). Es análogo, por su composición y sus propiedades, a las gomas, da con el agua disoluciones viscosas o se hincha en ellas para formar una pseudodisolución gelatinosa. Por lo tanto utilizado para la elaboración de cremas nos ayuda a que la emulsión se produzca con más facilidad.
  El mucílago tiene un alto poder suavizante.
  La linaza es una semilla con un alto contenido en ácidos grasos esenciales, en especial Omega 3, además es rica en componenetes antibacterianos, principalmente ácido acético, málico, ferúlico y clorogénico, luteína y cisteína, todo ello unido a las propiedades de la sacarosa y el zinc, le confieren propiedades adecuadas para la reparación, protección y cuidado de la piel.
  Para preparar el mucílago de linaza necesitarmos semillas de lino y agua destilada. Calentamos el agua y le añadimos las semillas bien limpias de restos de polvo, las dejamos en remojo durante al menos 12 horas y despúes colamos el mucílago, podemos limpiarlo si lo hacemos pasar por un filtro de café o una tela fina, yo utilizo un trozo de unas medias, se cuela rápido y queda limpio.
  Las cantidades pueden variar, pero podrían ser 1/2 litro de agua para 2 cucharadas soperas de semillas.
  Se puede emplear para preparar crema, formando parte de la fase acuosa de ésta y también en los jabones en sustitución de parte del agua, en éste caso debemos añadirlo preferentemente en la traza, aunque también se puede congelar y usarlo para preparar la sosa.

 Las cremas con mucílago de linaza son altamente reparadoras, de textura muy huntosa, densas pero muy suaves.


3. JABÓN EN POLVO PARA LA LAVADORA
  He hecho jabón para lavar varias veces, pero no conseguía dar con una fórmula que me gustase del todo, que dejase la ropa limpia, que no oliese a rancio, etc... Creo que por fín he dado con ella, os la cuento paso a paso:
   Para 1kg. de aceite reciclado de oliva hay que hacer la lejía con 272 grs.  de agua y 167 grs.  de sosa.
  El sobreengrasado del jabón de lavar (la ropa en la lavadora) es del -15% y la concentración del 38 %, para que sea durito, seque pronto y alcance la traza rápido.
 Además le he añadido 100 grs. de percarbonato, 100 grs. de detergente en polvo y un tapón de suavizante (esta parte es cosecha de Nizte, del foro de La costilla de Adán http://lacostilladeadan.foroactivo.net/, aunque he modificado las cantidades).
Nos ponemos los guantes, las gafas, la mascarilla y el delantal y manos a la obra:
  1. Pesamos el agua en un recipiente de cristal, por otro lado en otro recipiente pesamos la sosa. Echamos la sosa sobre el agua (y nunca al revés) y removemos bien. Dejamos que baje la temperatura a entre 30º y 40º.
  2. Pesamos el aceite y lo templamos a la misma temperatura que la lejía, entre 30º y 40º.
  3. Echamos la lejía sobre el aceite y removemos con cuidado. Primero lo hacemos a mano, y después podemos meterle la batidora de mano eléctrica, a muy baja velocidad.

  4. Cuando tengamos ya el jabón trazado, pero con una consistencia ligera, vamos a ir añadiéndo poco a poco el detergente, el percarbonato y el suavizante. Uno a uno y removiendo bien con la cuchara.


  5. Para ligarlo todo de forma más homogénea podemos meterle un poco más la batidora.
  6. Ahora ya está listo para enmoldarlo.
  7.  Lo dejamos secar bien sobre unas 12/24 hrs. 
    y después lo desenmoldamos y lo cortamos a tacos.
     
  8. Pasadas un par de semanas podemos triturarlao y reducirlo a polvo. Se deja secar un poco más, una semana, más o menos y ya estará listo para usar.

4. MICRONIZADOS

   Hacer un micronizado de vegetales, de hierbas o de cáscaras de alguna fruta puede sernos muy útil, bien para elaborar alguna crema o ungüento o para hacer jabón.
   En este caso voy a explicar cómo hacer un micronizado de la cáscara de los cítricos.
   Para su utilización hay que  lavar muy bien la fruta y con ayuda de un rallador haremos finas virutas de la zona exterior de la cáscara.
   Desecharemos la parte blanquecina del interior.
   Para desecar las ralladuras podemos optar por dos métodos:
  1. Ponerlas sobre un plato llano o una bandeja y dejarlas al sol. Las removeremos de vez en cuando mientras esperamos a que se sequen durante un par de dias.
  2. También podemos desecar las raspaduras en el horno a 50º C durante seis horas, colocamos las tiritas  en la bandeja del horno, sobre papel vegetal y cerramos la puerta, dejando que se sequen con el calor.
Una vez desecadas se pueden conservar en botes cerrados de cristal, tal cual o podemos molerlas, de este modo obtenemos la esencia pura de la cáscara de naranja y de limón.
  
El mismo proceso podemos seguirlo con las zanahorias, por ejemplo, esta vez hacemos tiras muy finas con la carne de la zanahoria, la desecamos y la micronizamos.
 Con las plantas, hierbas o flores podemos hacer lo mismo, siempre que previamente la hayamos secado.


5. OLEATOS
  Hacer un oleato es muy simple, basta con tener un buen aceite portador, oliva, girasol, pepita de uva, o cualquier otro que consideremos conveniente y el micronizado de la planta, vegetal, especia o fruta de la que queramos extraer las propiedades. También se pueden preparar con la planta seca sin micronizar, pero yo prefiero el micronizado pues le aporta más aroma y fragancia al oleato.
 Para el uso en jabones yo suelo hacerlos en aceite de oliva, excepto si lo quiero para enriquecer un jabón en el sobreengrasado, o para cremas y ungüentos, entonces empleo el aceite elegido para tal fin:
- Almendras dulces, para los oleatos de vainilla
- Cáñamo o pepita de uva para los cítricos
                                                            Oleato de cáscara de pomelo en aceite de cáñamo
- Sésamo para la zanahoria (por sus propiedades como protector frente a los rayos UV)
- Girasol para la caléndula, el hipérico, el sauco, el arpagofito, etc...
- Rosa mosqueta para los pétalos de rosa, etc...
 Con estos polvos se prepara el oleato en aceite, igualmente se pueden seguir dos procesos:
  1. En un bote de cristal mezclamos bien y dejamos reposar durante 40 días.
  2. Calentamos al baño María durante unas dos horas, removiendo de vez en cuando.
 Finalmente lo colamos con un paño fino, una media, un colador de tela para infusiones... y ya lo tenemos listo para usar, ahora debemos conservarlo en un lugar fresco y seco.

6. EXTRACCIÓN DEL JUGO DE ALOE VERA
El aloe es extraído de la penca de la planta recién cortada, siguiendo un proceso muy sencillo:
Cortamos una penca de la planta y la limpiamos bien.

Recortamos con un cuchillo los bordes con las partes puntiagudas de la penca.

Hacemos trozos la penca y retiramos las partes verdes,
hasta obtener la carne transparente.

Trituramos la pulpa y la reducimos a una papilla gelatinosa.